Año nuevo.
Este año se queda como el de los corajes y el de los miedos, aun no puedo olvidar(lo), pensar que estaría aquí me hace entristecerme un poco, pensar que tendría algunos meses, pensar, pensar me hará daño.
Pensar que pude haber muchas cosas y que no hice. Estoy de luto, la verdad, me duele un poco, pensar que nunca lloré por eso.
Te tengo a ti, corazón, es un tanto mi consuelo, es lo que me dió fuerzas, es lo que no me dejo caer.
Voy a dejar esto, quizá.
Nunca olvidaré esa noche de octubre, tampoco aquellas de julio, no voy a olvidar esa pizza con limonada, mucho menos esa perforación, no olvidaré la noche de febrero, tampoco los dulces, no olvidaré a Morrisey ni a los Smiths en el auto. No olvidaré a mi pequeña bolita blanca, ni el alcohol con mis amigos, no olvidaré las lágrimas y discusiones por teléfono, tampoco los parques y los cientos de caminatas, no voy a olvidar los conciertos, mucho menos a Austin, no voy a olvidar a mis amigos, a cada uno de los que siguen aquí y que poco a poco se van reduciendo, no olvidaré las terapias, no olvidaré los regalos que dí.
No fue el mejor año, pero cada quien construye su suerte.
Las horas cambian la historia.
Mañana son dos años con este blog, de nuevo, hay celebración.
¡Feliz comienzo del fin del mundo! Sí, así lo manejaré, quizá funcione.
sábado, 31 de diciembre de 2011
martes, 27 de diciembre de 2011
We should do a lot of things.
But I'm selfish. I want to say that u're more than u think u are for me. I want use ur headphones and ur cellphone as we laugh. I want make u angry with me for after make u smile. I want ur healthness. I want u.
viernes, 14 de octubre de 2011
Stand by.
Comenzar a escribirte es algo triste, siempre escribir fue triste porque significaba que realmente era algo que no me atrevía a decirte y que por ello lo plasmaba aquí.
Despedirme de ti ha sido de las cosas más desesperanzadoras que me han pasado últimamente y eso que últimamente todo se ha llenado de desesperanza. No puedo caminar por la ciudad sin recordarte o sin pensar que debimos haber caminado por ahí también. Mis ojos comienzan a anegarse de nuevo, pero esta vez, sin embargo, no es de enojo o decepción, es de sentimiento por saber que no estarás en mi cama más, porque aunque hayamos prometido con un anillo, siempre existe la otra posibilidad.
Hay tantas cosas que debimos haber hecho y que probablemente no hagamos ya nunca, juegos que debimos haber terminado y que creo que inconscientemente no terminamos por tener algo que nos mantuviera juntos.
Proponerte hacer recuentos y que te negaras me ilusiono un poco, el que me hayas dado tu parte de hilo me hizo ser un cliché, ese que se vuelve el momento previo al clímax final de la película...
Pero debo dejar de presionarte y hacerte crecer, debo dejar que te tropieces tu solo y volver a lastimarte si es necesario, para que me sueltes y corras lo que quieras correr, para que así, un día, decidas caminar de mi mano como solíamos.
Si no paraba de repetir a lo que olías era para no decirte que me encanta como hueles, si te mordía era para no tener que besarte, si te hice llorar era para no tener que recordarte, aunque nunca vaya a dejar de hacerlo, aunque no quiera dejar de hacerlo. Los susurros así como la luz que se nos apagó (literalmente) se van a quedar bien adentro, se van a quedar esperando por otros.
Y aunque me volví a sentir completa estando contigo, de ti aprenderé, de esto lo haré.
Ten, te regalo mis ojos, mi cabello y por sobre todo, te regalo mi persona, tu persona, esa que siempre va a estar en tus recuerdos y en tu historia.
lunes, 29 de agosto de 2011
sábado, 20 de agosto de 2011
martes, 2 de agosto de 2011
Insomnio.
El insomnio viene cada noche, acompañado de dolores y pensamientos, tan diversos como nadie podría imaginarlos. Las lágrimas no resbalan como uno quisiera, se detienen y se mantienen al punto, saben que si salen sería como admitir la derrota, una derrota que a pesar de tanto, viene y se mece dejando sin aire a los pulmones.
Los pensamientos, desde el mas inocente al mas cruel no dejan respirar ni tomar aliento, a veces vienen en forma de caridad y a veces en forma de enfermedad, nadie podría entenderlos, nadie que no haya estado en la misma situación. Lo que sí, es que el arrepentimiento no existe porque nunca lo ha habido, ni siquiera los reproches, solo la condición que no es aceptada.
Las percepciones cambian, todas, una a una y la mas intensa a falta de un adjetivo mejor, es aquella en la que sabes que no puedes desatar el mas gran vínculo que a pesar de los pocos años, te ha atado...
domingo, 3 de julio de 2011
Té de cereza con manzana.
Iba a escribir algo filosófico haciendo alusión al título de la entrada, que la vida es como tal y blabla, la verdad tomo de nuevo las palabras porque noté que hace un mes no escribo.
Podría escribir sobre las semanas que se vienen, sobre como he avanzado, sobre mis paranoias recientes sin embargo, no hay algo aun digno de crear. Me voy a considerar en proceso de inspiración.
Btw, el té sigue sobre mi escritorio, frío y dulce.
viernes, 3 de junio de 2011
domingo, 29 de mayo de 2011
Tú.
Un domingo, un domingo que no te veré porque en los que lo hago son excepciones muy especiales y sin embargo, han sido todas significativas.
Siempre estuve muy confundida, no me hacías llorar tanto, y dada mi naturaleza dramática mi cuerpo a veces no sabía como descargar las emociones, fueron contadas las veces que lloré por ti, puedo enumerártelas, y aun así todas fueron muy al principio cuando teóricamente ni siquiera debía llorar por ti porque aun no había un algo como el que ahora tenemos. Pero ayer fue muy diferente. Apagué la laptop, quería terminar un libro pero papá llamó, bajé las escaleras, me senté y conforme me fui sentando las lágrimas brotaron como nunca, resbalé y quede hecha un ovillo, él me preguntaba que me pasaba y no me quedó el remedio mas que de decirle que tenía mucho sentimiento porque me acababas de anunciar tus vacaciones, la verdad es que era eso y un miedo de esos que me carcomían al principio. Parecía que todas las lágrimas que nunca había soltado ayer se presenciaron, subí por tu pequeño y bajé para ver la que es mi película favorita. Creo que nunca la había visto con tal sentimiento, me fue muy devastador verla en tal estado, sólo me proyectaba poquito en la temática, aunque entre nosotros no haya una psicópata que nos quiera alejar o quizá sí, como sea, la escena del final me hizo llorar aún más.
Yo no quiero que te vayas, es lo que he susurrado para mis adentros estos últimos días, sin embargo a veces pienso que es opción mas viable, porque tú ya no estás bien, sé que me quieres, ¡vaya que lo sé!, pero algo en ti ya no está bien conmigo, intento entenderte pero me frustro al obtener vanos resultados y comienzo a sentirme inútil al intentar hacerte sentir bien, porque no me representa esfuerzo, pero me da un miedo avasallador el que yo te siga lastimando como ahorita, porque te he lastimado demasiado sin darme cuenta y al regresar sobre mis pasos, no encuentro mis errores. Quizá culpar a la rutina que por cierto no nos ha comido sería cómodo, pero es que tú eres una excepción muy grande. Quizá yo no lo exteriorizo tanto pero tú eres todo lo que hay, lo eres desde hace tantos meses, siempre ando buscando saber que piensas, porque aun no me la creo de que en verdad estás conmigo, de que en verdad hayas elegido estar bien, cosa que me llena de felicidad, aun no me creo que hayamos hecho crecer esto a este punto dado el carácter de ambos.
Quizá es prematuro esto, pero en serio ayer sentí que me iba a morir si tú en verdad te tomabas en serio mis palabras de que me dejaras, esas palabras que no las digo como son por el miedo que existe en mi de que las tomes y las apliques.
Y he de confesar muchas cosas, muchas explicaciones, cosas que si no las digo por aquí, no sacaría nunca, como la explicación de la elección de colores matutina, deje de preguntar los colores que me vestirían porque quise comenzar a sorprenderte, a arreglarme para ti (aun más) sin que supieras como lo haría, quería que te gustara salir conmigo porque aun recuerdo la noche en que por msn me dijiste lo que te gustaba de mi... Esa fue una.
La explicación de mi cabello, no hay que ahondar mucho, quería gustarte.
También algunas charlas eran para darte celos, quería saber que en serio te gustaba, quizá ni fue tan malo, porque al final pude dejar de sentir que sólo yo te quería sólo para mi.
Me cuesta tanto aceptar que tengo errores contigo porque para mi son los mas imperdonables, me cuesta tanto recrear tus lágrimas porque no quiero que las tengas por mi, no quiero que estés mal por mi, porque hago las cosas mal y te lastimo.
No lo digo desde aquella vez que me explicaste porque no decías que yo era tu todo, pero tu eres lo mio, no he sentido algo tan mio como lo hago contigo, y aun así, sé bien que cualquier día podrías cruzar la puerta y terminar con todo, lo sé. Y sé que en gran parte también eso depende de mi, de las cicatrices que te comience a abrir pero es que me da miedo lastimarte aun más, por eso a veces me quedo callada, por eso a veces me alejo aunque no quiera alejarme, por eso a veces cuando recién peleamos no te toco aunque quisiera tocarte y abrazarte aun discutiendo.
Porque aun me dan muchos berrinches referentes a otras chicas, últimamente confieso me ataca el de que no veas películas conmigo cuando yo casi te rogabas que lo hicieras, porque quiero compartir contigo una de mis pasiones, me da también el berrinche de que alguien mas te saque sonrisas, ¡carajo! yo quiero ser la que lo haga, quiero estar siempre para ti, quiero ser egoístamente lo único que veas, lo único que escuches, lo único que ames...
Quiero ser tu todo, así como tú eres el mio. Porque yo ya no me hallo si no es contigo, ya no necesito de las palabras de alguien mas que no sean las tuyas, porque no me ha importado que algunas cosas se vayan con tal de estar contigo y tampoco me importar repetir mil veces tu nombre a la demás gente, porque en verdad eres lo único que me importa y lo único que hay adentro. Porque los ataques que me dan últimamente en los que te digo cuanto te amo, apenas son el asomo del verdadero sentimiento.
viernes, 20 de mayo de 2011
domingo, 3 de abril de 2011
Me doy el lujo de escribir porque creo que en mis 17 años de vida no había habido injusticia mas grande.
Esas ganas de mi padre de imponer y recalcar su autoridad sobre mi comienzan a darme nauseas, parecería un berrinche, de esos grandes y sin sentido, pero para mi tiene sentido.
Lo único que espero en el año, en serio lo único para lo que me esfuerzo porque vaya que me esfuerzo y me lo quitan, y aun dejándome humillar, dejándome pisotear y que me consideren la peor persona del mundo, aun así me encierran, me dicen que no sin argumentos viables.
Es entonces cuando me doy el lujo de llorar de rabia, de sentimientos porque no son capaces de una vez en su vida dejarme ser feliz un poquito, ni siquiera en mi cumpleaños, ni siquiera nunca.
¡Bah! Así será siempre ¿verdad?
jueves, 31 de marzo de 2011
domingo, 20 de febrero de 2011
Lo estresantes que estuvieron los días no tuvieron nombre, pasaron cosas tristisimas y pasaste tú.
Fuiste lo único que me ayudó a no desplomarme y a acabar en mi cabeza sola, abrazada y compadeciéndome.
Otra persona más me dijo que no me autocompadeciera tanto, que no me iba tan mal como suponía que lo iba, lo más irónico fue que esa persona era la menos indicada, quizá, para decírmelo, pero en fin.
Las cosas si fueron muy tristes, lloré como pocas veces se llora, por miedo, por angustia, por enojo y por incomprensión, pero estoy casi segura de que eso se acabó con el bello concierto de ayer, con eso y con tu voz cantándome al oído, pero ahora, confieso, me da mucho más miedo amarte como te amo, porque estoy empezando a planear y eso me da miedo.
¿Y si te vas?
Nunca me dejes, o mis ojos no conocerán la sequía
mis pensamientos darán vueltas alrededor de ti
mi corazón se encogerá, mi ser será un delirio...
jueves, 17 de febrero de 2011
"Tú sola te estás encerrando". Lo dijo mi madre. Me dolió pensar que a pesar de haber llorado tanto estos últimos días dijeran que yo me estaba encerrando y que no les explicaba los motivos de mis lágrimas. Son mis padres, deberían saberlo.
Estaban mas preocupados por lo que pasaba en la familia, por otras personas, que por la niña que habían creado, que lloraba sin parar, que su cuerpo estaba colapsando. Esto me hirió cada vez mas, me quede dormida tras mojar por completo las almohadas y las sábanas, mi cabello.
Necesitaba un abrazo y mientras tanto, el padre de ella se encontraba en la parte posterior del departamento, jugando videojuegos con su sobrino.
domingo, 6 de febrero de 2011
Forever & Amen.
We, we are in love
and we forever
We not gonna stop
We'll be forever
And all the stars in the sky
And all the flowers in the fields
And all the flower in the earth
Could never take you from my heart
And it's forever, baby it's forever...
La mitad.
Estaban ahí encerrados en la habitación gris.
Los oídos de ambos estaban muy sensibles, los sonidos se amplificaban magnificamente y no eran capaces de soportar mas que sus propias voces. Hablaban en voz baja. Trataban de no tocarse, las caricias eran choques para sus nervios y reproducían placeres que ni tras horas en la cama se lograban. De repente reían, de repente se abrazaban y se soltaban porque no eran capaces de soportarse tan cerca. Los ojos de ambos estaban explosivos, las pupilas estaban fuera de lugar. Pronto acabaron sin la parte superior de la ropa y sin pensarlo se besaban, se olían, se fantaseaban.
Él quería alejarse del aroma, murmuraba cosas sin sentido al nulo entendimiento de ella y sólo le gritaba que volviera a acostarse a su lado. Se tapaba la cara, la cabeza le daba vueltas. Él regresaba y de nuevo se encontraban provocando al otro.
El techo llamaba su atención, el sonido de los autos por la ventana, los maullidos de los gatos circundantes, el raspar del aserrín, las cortinas y la pared era todo lo que se veía.
Cada uno estaba en una realidad distorsionada del otro. Quien sabe cuantas cosas se estaban imaginando.
Así pasaron algunas horas. Estaban tan encerrados en ellos mismo y en ese cuarto que a veces salían demonios propios, las cosas por momentos se tornaban peligrosas para ambos, se gritaban y se sollozaban.
El no poder besarse como querían a él lo estaba sacando de quicio, ella sólo pensaba en que no era tan importante el discurso que él estaba recitando. El que pasaran las horas y no se percataran era una secuela de todo aquello.
Se levantaron de la cama, se vistieron como pudieron, discutieron, él lloró, ella se asustó. Caminaron a la calle a la mitad de los efectos, no notaron muchas cosas, atravesaron unas cuantas calles, se abrazaron un poco.
Ella logró sanar un poco del dolor que le impedía saborear las sensaciones que no había experimentado antes y que ya la frustraban en demasía. Se rieron un poco más del estado en que estaban, ataban cabos torpemente y se sorprendían un poco de las razones que los habían llevado a estar en tan mal estado. Volvieron a acabar entrelazados, no había mas que todo aquello. El futuro inmediato no era tan importante. Jugaban con sus cuerpos, con sus caderas, con sus labios y cuellos. De nuevo las horas pasaron y ni se percataban de que todo aquello era absurdo en el momento. Querían mas y sabían que nada era personal.
Temblaban, sudaban, no soportaban.
Aun faltaba por terminar, pero ellos ya habían terminado con su tiempo, no había mas que terminarlo cada quien por separado. Temblaron de frío juntos por última vez y con un beso mas bien apresurado terminaron el delirio que habían producido juntos.
Hablar de lo que cada quien vivió en su cabeza, de lo que cada quien reprodujo en su realidad es tan incomprensible.
jueves, 3 de febrero de 2011
Y como le dije a mi psicóloga, creo que he llegado a considerarme una persona que si no está hundida hasta el fondo no sale de sus problemas. Lamentablemente para unas cosas ya lo estoy para otras no tanto y siento que podría seguirme dando de topes con la pared.
El punto es que aprendí que si algo no te funciona tienes que intentar con algo más, no es válido estancarte con una sola solución ni estancarte en una duda, mas vale resolverlas.
domingo, 30 de enero de 2011
jueves, 20 de enero de 2011
No solía importarle lo que pasaría al final de la semana, solía reirse mucho más y vivía un poco mas responsable, tenía muchas mas ansías que ahora y le gustaba ver a la gente sonreir.
Había uno que otro muchacho el cual le llamaba la atención, se sentaba debajo del puente y pasaba ahí horas escuchando música, leyendo y diciendo tonterías con sus amigos, no le llamaban la atención ciertas cosas y solía odiar ese pasillo, esas bancas.
Apenas y se asomaba su yo vanidosa, realmente no se complacía mucho y solía gritar mucho más, estaba segura de que todavía faltaba mucho tiempo para crecer, y que a pesar de que el tiempo se le estaba llendo como agua, ella aún esperaba.
Había un muchacho moreno, de complexión pequeña que solía observarla mucho y que la cuestionaba muy profundamente, la dejaba pensando por horas.
Los caminos eran igual de fastidiosos pero mas provechosos, iban acompañados de pláticas largas y de estudio, pocas veces se asomaba a ese lugar obscuro y aun menos a los árboles de entre las rejas, quizá fumaba cigarrillos mas seguido y realmente visitaba más a sus viejos amigos...
Es tan fácil perderte entre las cosas, circunstancias y abismos personales.
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