Sube a la azotea, se sienta y se pone a pensar. El paisaje difiere mucho al de su antiguo lugar, en este hay mas edificios e irónicamente más tranquilidad. Había estado muy rara los últimos días y lo sabía, todo lo contribuía a sus hormonas confundidas y ahora lo sabía con certeza, había tenido muchos ataques de llanto y de sensibilidad, también muchos ataques de coraje, y ya comenzaba a sentirse mal con las personas que habían estado presentes en ellos.

Pensó un poco más en lo que estaba en su cabeza la última temporada, con la llegada de un nuevo miembro de la familia no puede evitar pensar en el transcurso del tiempo, en que ahora sentía como pasaba por ella, a veces le aterraba, debía admitirlo pero últimamente lo tomaba con mucha "filosofía", así le gustaba pensar, recordaba todas aquellas veces en que deseaba tener esta edad y en como no era muy diferente, pensaba también en lo que deseaba hacer en un par de años, en que quería romper su propio molde y aun más construirse un par de alas que la llevarán a otros lugares, París era el favorito sin lugar a dudas pero también había un viaje de "mochilazo" que realmente quería hacer, quería conocer su propio país y también quería conocer gente, quería vivir su propio estereotipo de escritor.

¿Estudiar? Aun no elegía entre dos carreras, pero comenzaba a sentir pánico, dos ciclos escolares más y terminaba su preparatoria, aun no sabía como iba a organizar los años pero sabía como vivirlos.

Amigos que tenía mucho no leía, no escuchaba fueron llegando, había una chica en especial, una persona que había estado con ella desde hace 10 años, ¡Cuánto tiempo ya! a veces solía creer que era uno de sus ángeles, porque siempre estaba ahí cuando necesitaba que alguien la cuidará, quizá era cierto, quizá aun se necesitaba más para confirmarlo.

Se daba cuenta de que no quería estar cerca de la misma gente, claro está no de toda, quería alejarse un poquito de todos, quería buscar su propio reinvento pues justo reinventarse era algo que le hacía falta, aunque poco a poco lo estaba haciendo. Empezando desde afuera lo fue haciendo, ahora lo más difícil era cuando hacía limpieza del alma, poco a poco iba sanando, iba encontrándose, aunque había partes que seguían bloqueadas; como el hecho de que no podía seguir leyendo libros, los comenzaba pero había algo que los hacía dejar de lado y comenzar con otro distinto y de repente ella misma desistía, eso ya era un problema que comenzaba a frustrarla.

También estaba el hecho de que tenía tantas cosas que decir pero no sabía como decirlas y mucho menos a quien, ella misma provocaba que todos se alejarán y acababa peor. Buscaba el modo adecuado para usar esa palabra, buscaba y buscaba, acertó en que tener un poco de promiscuidad no era lo adecuado, mucho menos hacer lo que odiaba que le hicieran, después de todo ella misma sabe que todo se paga.

Había visto una película que la hacía llorar inmensamente y la hacía sentir la realidad de frente y de golpe como suele suceder cuando estás creciendo, no quería que las cosas siguieran, quería detenerse a evaluar sus acciones, quería más tiempo ¡Era lo que le hacía falta! Necesitaba analizar lo que había hecho en este tiempo, necesitaba no sentirse tan apresurada y tampoco quería sentir que necesitaba dar respuestas en poco tiempo.

Después comprendió las consecuencias de lo que hacía y quizá ya era tarde para corregir la mayoría de sus decisiones...